Vía TuVerde. Por Yael Barcesat.
Imagen: SebastianUrbina.blogspot.com.
Estamos habituados a escuchar la palabra filosofía y pensar inmediatamente en un conjunto de conocimientos teóricos, abstractos, muchas veces sin aplicación en la vida cotidiana. En la cultura occidental, esa palabra se asocia de manera refleja a los sistemas de pensamiento que prosperaron a partir de los griegos. En ellos, las respuestas a los problemas existenciales se buscan a partir de la deducción lógica, de la investigación mental. No se valorizan especialmente la experiencia práctica existencial, ni la coherencia entre las formulaciones filosóficas y el estilo de vida de quien las enuncia.
Sin embargo, en otras culturas, la palabra filosofía puede tener una connotación totalmente práctica, refiriéndose más a menudo a una visión particular del cosmos que es determinada por acciones concretas, cotidianas. Esa forma de percibir y de actuar se aprende a través de técnicas y a través del ejemplo.
¿Cuáles son las cualidades básicas a desarrollar para aprehender una filosofía práctica como es el Método DeRose?
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